Crema facial hidratante antienvejecimiento, con prebioticos

Ingredientes: Aqua (agua), Rubus Idaeus Seed Oil* (aceite de frambuesa), Argania Spinosa Kernel Oil* (aceite de argán), Glycerin* (glicerina vegetal), Sorbitan Olivate, Leuconostoc / Radish Root Ferment Filtrate (extracto de rábano), Cetearyl Olivate, Benzyl Alcohol, Tocopherol (vitamina E natural), Rosa Damascena Flower Extract* (rosa de damasco), Rosmarinus Officinalis Oil* (aceite esencial de romero), Helianthus Annuus Seed Oil (aceite de girasol), Dehydroacetic Acid, Limonene**, Linalool**. (*) ingrediente ecológico certificado, (**) componente natural de los aceites esenciales.

78,28% Ingredientes ecológicos del total de ingredientes del producto

Testada bajo control dermatológico

Vegano

Indicada en: Todo tipo de pieles, que buscan mayor protección y efecto antiedad.

Descripción del producto: Crema facial antiedad, protectora y antioxidante. Emulsión ligera, hidratante y tonificante, de suave aroma herbal, y alta concentración en antioxidantes. Su ingrediente clave, el aceite de semilla de frambuesa, con uno de los índices de antioxidantes más altos que existen, gracias a su contenido en ácidos grasos poliinsaturados: linoleico (omega 6), alfa-linolénico (omega 3) y oleico (omega 9), Tocopherol, Tocotrienol y Carotenoides, que ejercen un potente efecto anti-radicales libres, y ayudan a prevenir la oxidación y con ella el envejecimiento de la piel a causa de factores ambientales como la exposición al sol. La vitamina E natural, y el aceite de argán, también rico en vitaminas E y ácidos grasos insaturados complementan este efecto protector antioxidante. Además, el aceite esencial romero aporta frescor y un efecto reafirmante, que complementa la suavidad que aporta el extracto de rábano fermentado.

Proporción oleosa total: 16.62%

Modo de uso: Aplicar sobre el rostro limpio y seco con un suave masaje dos veces al día (mañana y noche).

Consejo de higiene facial: Se recomienda empezar el lavado del rostro con agua tibia o calentita al gusto (para dilatar los poros y que expulsen la suciedad contenida) y terminar siempre con agua fría (para cerrarlos y activar la circulación), luego secar bien con un paño limpio y preferiblemente de algodón u otra fibra natural, que se use exclusivamente para la higiene facial.

Productos complementarios: JABÓN DE KARITÉ Y CARBÓN ACTIVADO (antipolución), perfectos para la higiene diaria del rostro. Aportan propiedades limpiadoras y bactericidas, ayudan a equilibrar la secreción grasa de la piel, y eliminan bacterias e impurezas, manteniendo la piel limpia y nutrida. Para mayor efecto antioxidante (antiedad) y mayor nutrición en la zona del contorno de ojos, complementar con el ACEITE FACIAL EQUILIBRANTE (descongestivo y cicatrizante).

Envase: tarro de vidrio y tapadera metálica