Ingredientes: Glycerin* (glicerina vegetal), Aqua (agua), Kaolin (arcilla blanca), Cocos Nucifera Oil* (aceite de coco), Calcium Carbonate (carbonato cálcico), Alcohol* (alcohol vegetal), Xanthan Gum (goma xantana), Mentha Aquatica Leaf Oil* (aceite esencial de hierbabuena), Sea Salt (sal marina), Mentha Aquatica Leaf Extract* (hierbabuena). (*) ingrediente ecológico certificado, (**) componente natural de los aceites esenciales.

98,56% de ingredientes ecológicos del total de ingredientes del producto

Testado bajo control dermatológico

Vegano

Descripción: Sin flúor / Sin gluten / Con calcio. Pasta de dientes no abrasiva, de uso diario y sabor mentolado. Apta para peques y adultos. Todos los ingredientes que contiene son de calidad alimentaria, no conteniendo conservantes ni surfactantes. Su textura es cremosa y se extiende homogéneamente con facilidad.

Contiene aceite de coco virgen con una riqueza de ácido láurico del 41 al 56%, ácido graso caracterizado por poseer un efecto antibacteriano capaz de proteger piel y mucosas de gérmenes, bacterias u hongos, dejando un aliento más fresco. Además, el aceite de coco ayuda a mejorar la salud de las encías reduciendo su inflamación (gingivitis).

El poder alcalinizante y neutralizante de la arcilla permite contrarrestar la acción de los azúcares, precursores de caries, limitando la aparición de las mismas y equilibrando además el pH de la saliva hacia valores menos ácidos, acción que ayuda a proteger el esmalte y a reducir la sensibilidad dental. Además, la combinación mineral de caolín y carbonato cálcico de fina granulometría aporta propiedades remineralizantes que sumadas al efecto antiséptico del aceite esencial de hierbabuena contribuyen a proteger las encías y limpiar la boca en profundidad.

Modo de uso: Coger una pequeña cantidad pasta de dientes (como un garbanzo) con el aplicador de bambú y aplicarla en el cepillo dental previamente humedecido. A posteriori, guarda el aplicador limpio y sujeto al tarro (con su elástico) para evitar perderlo. Recomendamos el uso del aplicador limpio, y no introducir nunca el cepillo directamente en el envase, para evitar posibles contaminaciones bacterianas.

Envase: tarro de vidrio, tapadera metálica, espátula de bambú y elástico de sujeción.